First Day of Unleavened Bread

¡Saludos, hermanos! ¡Bienvenidos al primer día de la Fiesta de Panes sin Levadura! Estoy seguro que todos tuvieron una Pascua inspiradora y una gozosa Noche para ser muy observada. Por supuesto, el éxodo para los hijos de Israel es un prototipo de Dios llamándonos a salir de este mundo.

Este Sábado y todos los Días Santos, siendo las Fiestas señaladas de Dios, tienen significado para los hijos de Israel cuyo Dios estuvo tratando con ellos, como ya hemos visto y cubierto, y tiene significado para nosotros. Hoy Dios ha llamado a Su pueblo. Hoy Dios quiere que crezcamos en gracia y conocimiento, para vencer y cambiar.

La Fiesta de Panes sin Levadura es aquella Fiesta que representa lo que estaremos haciendo, y que Dios también está haciendo por nosotros, lo cual es lo más importante. La Fiesta de Panes sin Levadura tiene un significado grande y tremendo para nosotros, los verdaderos cristianos de Dios, aquellos quienes son llamados a salir del mundo; aunque vivimos en el mundo, no somos parte del mundo.

Jesús oró una oración especial: Oro que Tú no los saques del mundo, sino los protejas del maligno. ¡Ellos no son del mundo así como Yo no soy del mundo! Esto es lo que la Fiesta de Panes sin Levadura representa para nosotros, lo que Dios está haciendo en nuestras vidas.

En las Escrituras que cubrimos, aquí hay un verso que describe muy pero muy bien lo que hacemos con los Días Santos; así mismo con el Sábado, la Palabra de Dios, con todo lo que hacemos. Tenemos lo más grande e importante que hacer en el mundo.

· Dios está con nosotros

· Dios está en nosotros

· Dios está dirigiéndonos

· Él nos ha dado el poder de Su Espíritu Santo para guiarnos

· Él nos ha dado Su Palabra, Su Palabra hablada

ü a Moisés

ü a los Profetas

ü a los apóstoles

ü a nosotros

—de modo que podemos llegar a ser instruidos en temporada y fuera de temporada.

Debemos ir sobre estas cosas como quiere Dios, y también mientras tenemos repetición aprendemos, y aprendemos más, y así es como ponemos juntamente la Palabra de Dios: línea sobre línea, precepto sobre precepto, aquí un poquito y allí un poquito, y ponerlo todo junto. Hay una representación grande y tremenda de toda la Fiesta de Panes sin Levadura.

Jesús también explicó esto en Mateo 13:52: “Entonces Él [Jesús] les dijo, “Por tanto, todo escriba…” Esto es lo que en realidad es un ministro, un escriba, y él usa la Palabra de Dios para enseñar; y todos nosotros debemos llegar a ser escribas desde el punto de vista que podemos enseñar a otros. Esto no es tan solo dejado al ministerio. Vea en el libro de Hechos y vea lo que hicieron diferentes hermanos; ¡es algo tremendo!

Traeremos juntamente las Escrituras que son viejas, aquellas con las que estamos familiarizados; y entenderemos nuevas cosas de lo viejo y entenderemos viejas cosas de lo nuevo y lo pondremos todo juntamente.

Levítico 23 es donde están todos los Días Santos. Estos son los tiempos señalados de Dios. El primer tiempo señalado es el Sábado. Cada séptimo día, el Sábado es el verdadero séptimo día—no como algunos calendarios que en algunos lugares tienen el domingo como el séptimo día. Venimos juntos ante Dios; el Espíritu de Dios está en nosotros; el Espíritu de Dios está trabajando con nosotros. Tenemos compañerismo con Dios el Padre y Jesucristo, estudiamos la Palabra de Dios y somos alimentados espiritualmente de modo que podemos crecer en gracia y conocimiento.

Los tiempos señalados que tenemos aquí para la Fiesta de Panes sin Levadura tienen un significado especial en el Nuevo Testamento. Ya hemos cubierto algo del significado para el Antiguo Testamento. Vamos a enfocarnos hoy en cuál es el significado de la Fiesta de Panes sin Levadura para nosotros.

Levítico 23:6: “Y en el quinceavo día del mismo mes…”—el primer mes del año de acuerdo al Calendario hebreo calculado. Hay algunas personas que piensan que saben más que Dios y salen e intentan y desarrollan su propio calendario santo.

· ¿Puede pensar como Dios?

· ¿Conoce como trabaja el universo?

· ¿Entiende los movimientos de la tierra?

· ¿Entiende los movimientos de la luna?

· ¿Entiende los movimientos del sol?

· ¿Entiende cómo se ajusta todo?

· ¿Sabe cómo calcular el tiempo u observar el tiempo?

¡No puede observar y ser preciso!

· ¿Sabe usted todo eso?

Si es así, entonces puede hacer su propio calendario. Pero si no, ¿no cree que tan solo está adivinando?

“…es la Fiesta de Panes sin Levadura al SEÑOR. Deben comer pan sin levadura siete días. En el primer día tendrán una santa convocación. No harán ningún trabajo servil en el, sino ofrecerán una ofrenda por fuego al SEÑOR siete días. En el séptimo día tendrán una santa convocación. No harán trabajo servil en el” (vs 6-8).

Hoy, dado que no tenemos ofrendas de animales cada día, lo que hacemos es tomar ofrendas en los Días Santos.

En II Corintios 9 tenemos una promesa que Pablo escribió. Dado que somos como un cultivo, somos la Fiesta de los Primeros frutos, aquí Pablo traza una analogía entre plantar, crecer, segar y cosechar. Esto era en un tiempo cuando Pablo estaba instruyéndolos a plantar varias comidas, de modo que podían llevarlos—después de la cosecha—a Jerusalén, a causa del hambre que tenían allí.

Aquí hay un principio para nosotros en lo que hacemos al servir a Dios, porque Dios condena a toda la nación de Israel que ellos han ‘robado a Dios en diezmos y ofrendas.’ ¡Vea el desorden que tenemos hoy a causa de hacer eso! Podemos trazar una analogía espiritual de esto y aplicarlo a nuestras vidas.

· si hace poco, recibirá poco

· si hace abundantemente, recibirá abundantemente

Esa es toda la historia de las siete Iglesias en Apocalipsis 2 & 3.

II Corintios 9:6: “Pero esto digo: aquel que siembra escasamente también cosechará escasamente; y aquel que siembra generosamente también cosechará generosamente. Cada uno como propone en su corazón, pero no a regañadientes o por compulsión; porque Dios ama al dador alegre” (vs 6-7).

Recuerde la parábola del sembrador, donde las semillas cayeron en el camino, o en terreno no hondo, o en espinos. No produjeron fruto. Pero aquellos quienes produjeron fruto dieron 30, 60 y 100 veces.

Eso es lo que intentamos y hacemos con las ofrendas y diezmos que recibimos de los hermanos, hacerlos multiplicar: alcanzar a más gente, producir las cosas necesarias de modo que podemos crecer en gracia y conocimiento y tener aquella gran relación espiritual con Dios el Padre y Jesucristo ¡cada día!

Todo esto es lo que escogemos hacer, sea diariamente, semanalmente, anualmente, siempre llegando a lo que escogemos hacer.

Aquí está la clave, v 7: “Cada uno como propone en su corazón, pero no a regañadientes o por compulsión; porque Dios ama al dador alegre. Porque Dios es capaz de hacer que toda gracia abunde hacia ustedes para que en toda forma puedan siempre tener suficiencia en todas las cosas, y puedan abundar hacia toda buena obra” (vs 7-8).

Como hemos visto, las buenas obras que Dios quiere que hagamos son aquellas obras espirituales que desarrollan carácter, que emulan de nosotros a causa del amor, Verdad y justicia a través del Espíritu Santo de Dios.

(pausa para la ofrenda)

Gracias hermanos, por la ofrenda. Sabemos que en estos tiempos difíciles algunas veces es muy importante que nosotros también contribuyamos, entendiendo que Dios es capaz de obrar las cosas a Su manera con Sus bendiciones.

¿Por qué guardamos la Fiesta de Panes sin Levadura? ¡Una razón muy importante! Al llegar a la Fiesta, lo más importante entre cada uno de nosotros y Dios es la Pascua. La verdadera Pascua Cristiana renueva el Nuevo Pacto. Tenemos, cada año, el recordatorio de lo que necesitamos hacer: la bendición del Espíritu de Dios en nuestra vida. Para que esto continúe, como Pablo ha escrito, guardamos la Fiesta de Panes sin Levadura. Sí, debemos deshacernos de la levadura de nuestras casas. Pero eso no es el punto clave. Eso es físicamente, pero espiritualmente representa lo que debemos estar haciendo.

Ellos tenían problemas en la Iglesia de Corinto, y estaban dejando el pecado en sus vidas. Recuerde, como Pablo ha escrito muchas veces, ¡un poco de levadura leuda toda la masa!

I Corintios 5:6: “Su jactancia no es buena. ¿No saben que un poco de levadura leuda la masa entera? Por tanto, límpiense de la vieja levadura,…” (vs 6-7)—limpiar, deshacerse, expulsar y vaciarla. La vaciamos con el Espíritu de Dios, el cual es:

· el agua

· el poder

· la limpieza

“…para que puedan convertirse en una nueva masa,…” (v 7)—una nueva criatura. Estamos siendo creados hacia buenas obras en Cristo Jesús. Cuando dice que si somos de Cristo somos una nueva criatura eso no significa que es terminado; alcanzado. Estamos siendo creados y dado que esta allí con el Espíritu de Dios, eso debe estar creciendo, venciendo, produciendo los frutos espirituales. “…convertirse en una nueva masa,…” y no seremos terminados sino hasta la resurrección.

“…incluso como están sin levadura.…” (v 7). Ellos olvidaron el propósito de deshacerse de la levadura de sus casas en lo que aplica al significado espiritual de la Fiesta de Panes sin Levadura. Cuando hace eso olvida el mismo propósito de la Pascua. Olvida el significado del Día de la Pascua en el cual Jesucristo murió. Él murió por los pecados de todo el mundo. ¡Cada ser humano tiene parte en crucificar a Cristo!

La razón: “…Porque Cristo nuestra Pascua fue sacrificado por nosotros” (v 7). Es por eso que sabemos que Jesús nos dijo que si comemos Su carne y bebemos Su sangre debemos ¡vivir por Él! Piense de esta forma:

· Físicamente vivimos porque respiramos, comemos y Dios provee cosas para nosotros.

· Espiritualmente vivimos porque Cristo murió por nosotros, resucitó de los muertos de modo que nosotros pudiéramos tener nuestros pecados perdonados y ser justificados con Dios, y que Él y el Padre habitarán en nosotros de modo que producimos fruto:

ü crecemos

ü cambiamos

ü vencemos

ü llegamos a ser una nueva masa

Pablo dice, 8: “Por esta razón,… [el propósito de Panes sin Levadura] …guardemos la fiesta, no con la vieja levadura,…” No en la forma en que nos hemos estado comportando. Sí, necesitamos arrepentirnos de todas esas cosas y vencer. Sí, algunos de ellos pueden requerir bastante y demasiado trabajo para vencerlos, porque están profundizados en nosotros. Pero Dios nos ha dado el poder de hacerlo.

“…ni con la levadura de malicia y maldad,…” (v 8). Debemos estar en paz con todos: esposo y esposa, padre, madre e hijos.

De otro lado tenemos, para aquellos que no creen, tal vez la paz en este tiempo es imposible. Pero la paz más grande que tenemos será con Dios el Padre y Jesucristo, como veremos en el Sábado durante la Fiesta de Panes sin Levadura.

“…sino con el pan sin levadura de sinceridad y verdad” (v 8). ¿Dónde se aloja esto? Entendamos: Puede ver a la gente, pero hay algo que no puede hacer; realmente no sabe lo que pasa en la mente de la otra persona. Algunas veces puede adivinar, especialmente las esposas a sus esposos o los esposos a sus esposas. Pero eso no significa que conozca sus pensamientos. Veamos en donde comenzamos, y en donde necesitamos terminar. La naturaleza humana es ‘engañosa sobre todas las cosas.’ El ‘corazón es desesperadamente malo.’ Jesús nos dijo acerca de esto en Marcos 7.

No importa cuán buenos pensemos que somos, o si cometemos el pecado de compararnos nosotros mismos con otras personas y pensamos que somos más rectos que ellos o no somos tan malos como ellos—aunque pueda ser parcialmente el caso—lo que pasa en la mente es en lo que Dios está centrado para la Fiesta de Panes sin Levadura. Durante Panes sin Levadura la levadura es un tipo de pecado. Con seguridad, ¡está en todo lugar! La razón por la que Dios escogió pan sin levadura es porque el pan es usado diariamente. El pan está allí para todo y hay pecado en todo lugar, ¡en todo!

Esta es una lección; esta es una gran lección. Aquí es donde comenzamos, y veremos donde Dios quiere que terminemos. Pero ninguna de las cosas que están aquí puede ser llevada al Reino de Dios. Dios espera de nosotros, así como sacamos la levadura de nuestras casas, debemos sacar el pecado de nuestras vidas. Así como debemos buscarla y trabajar duro para ver donde está, debemos buscarlo y trabajar duro para entender como sacarlo de nuestra mente.

Recuerde lo que escribió Santiago, no puede tener pensamientos de pecado y miseria y asesinato y adorar a Dios al mismo tiempo, porque ‘agua salada y agua dulce no salen de la misma fuente.’

Marcos 7:20: “Y Él [Jesús] dijo, “Eso que brota desde adentro de un hombre, eso profana al hombre.” Por supuesto, el problema era que los escribas y fariseos vieron a los discípulos de Jesús comiendo con manos sin lavar. ‘Oh, se estarían profanando si tienen un poco de mugre en ellos.’ Pruebe una zanahoria; ¿lo profanará eso? ¡No!

· aquí está en lo que necesitamos concentrarnos

· aquí está lo que debemos vencer

· aquí está lo que debe ser cambiado y vencido

Verso 21: “Porque desde adentro, de los corazones de los hombres,…” Veamos nuestras vidas, vea las vidas de las personas que conoce a largo plazo. Vea el mundo; ¡que desorden! ¿Quién es el autor que viene como el poder espiritual del aire para infundir cosas a nuestra mente saliendo de la televisión, radio, u otras personas que están alrededor, además de lo que tenemos en nuestra propia mente? Es bueno entender cuan malos somos en realidad, de modo que podemos arrepentirnos de eso, identificar eso y deshacernos de eso.

“…salen malos pensamientos, adulterios, fornicaciones, asesinatos, robos, codicias, maldades, engaño, libertinaje, un ojo malo, blasfemia, orgullo, tonterías;…. [¿qué nos hacen estas cosas?]: …todos estos males salen desde adentro, y profanan al hombre” (vs 21-23). Porque como el hombre y mujer piensen en su corazón, ¡así es como son!

Veamos las obras de la carne de la mente carnal, y de estas cosas el apóstol Pablo nos dijo que si no vencemos estas cosas, si no nos deshacemos de ellas, no vamos a entrar en el Reino de Dios.

Gálatas 5:19: “Y manifiestas son las obras de la carne,…”—esto es la mente carnal. ¿Qué es la mente carnal por naturaleza? ¡Enemiga de Dios! No sujeta a la Ley de Dios, ni tampoco, en verdad puede estarlo. No podemos tener una ‘religión’ y hacernos mejor. Necesitamos el Espíritu de Dios de modo que nuestros esfuerzos serán motivados, guiados y animados por Dios.

Aquí está lo que Pablo dice que es, y quiero que entienda cuanto sexo está involucrado en estas cosas, esto ha estado en cada generación, en cada civilización, en cada familia y en cada vida personal:

“…Y manifiestas son las obras de la carne, las cuales son estas: adulterio, fornicación, impureza, libertinaje, idolatría,…” (vs 19-20). ¿Que es idolatría?

Veamos porque Dios ni siquiera escucha a algunas personas, o responde a algunas personas, incluso a quienes son líderes. Ezequiel 14 es tremendo y demuestra porque es tan importante para nosotros arrepentirnos. Aquí están en un campamento de cautiverio, Ezequiel está allí con ellos, han sido exiliados de su campamento a causa de sus pecados, y van a Ezequiel y quieren saber cuál es la Palabra del Señor. ¿Qué hace falta? ¿Fueron a Ezequiel a arrepentirse? ¡No!

Ezequiel 14: “Y algunos de los ancianos de Israel vinieron a mí y se sentaron delante de mí. Y la Palabra del SEÑOR vino a mí, diciendo, “Hijo de hombre,…’” (vs 1-3). Escuche cuidadosamente. Esta es una de las cosas que es listada como obras de la carne, la cual necesita sacar de su mente. Usted puede tener muchos ídolos en su mente. Notemos lo que eso hace entre nosotros y una relación con Dios.

“‘…estos hombres han colocado sus ídolos en sus corazones, y puesto el bloque de tropiezo de su iniquidad delante de sus rostros. ¿Debería en absoluto ser consultado por ellos?” (v 3). ¡Claro que no! La levadura que Dios quiere sacar de nosotros es la levadura de las obras de la carne, aquellas cosas generadas por la mente carnal. Él tiene un propósito en eso. Recuerde, la Fiesta es de siete días enteros.

Verso 4: “Por tanto háblales, y diles, ‘Así dice el SEÑOR Dios, “Todo hombre de la casa de Israel que coloque sus ídolos en su corazón,…”

· ¿Cuál es su ídolo?

· ¿Lo ha desmenuzado y deshecho de el?

· ¿Ha intentado resucitarlo en su mente nuevamente?

“…y ponga el bloque de tropiezo de su iniquidad delante de su rostro,… [todo esto es desde el interior] …y venga al profeta;… [o a Dios o a Cristo] …Yo el SEÑOR le responderé de acuerdo a la multitud de sus ídolos” (v 4). Note si no hacemos eso: vaya y lea lo que Jesús dijo a las siete Iglesias. A cada una de ellas Él dijo, ‘¡Arrepiéntanse!’ Incluso a la Iglesia de Sardis Él dijo, ‘Arrepiéntanse y mantengan las pocas cosas que les quedan, y no borraré su nombre del Libro de la Vida.’ Interesante, ¿cierto? Piense en eso por un momento.

Si no hacemos eso, v 5: “Para que pueda tomar a la casa de Israel en su propio corazón porque Me han abandonado por sus ídolos—todos ellos.” ’ Por tanto di a la casa de Israel, ‘Así dice el SEÑOR Dios, “Arrepiéntanse y vuélvanse de sus ídolos, y alejen sus rostros de todas sus abominaciones” (vs 5-6).

Leamos acerca de algunas de esas abominaciones, y lo que le ha pasado a la Iglesia.

· Si no cree o entiende que todos—desde los 1920 hasta hoy—hemos sido laodiceanos…

· Si no entiende eso y toma la lección que Dios ha dicho a los laodiceanos: arrepiéntanse y sean celosos, porque Cristo está golpeando a la puerta…

Muchos hoy en día han expulsado a Cristo incluso en las Iglesias de Dios.

· ¿Dónde están todas las personas que atendían cuando teníamos la Fiesta con 120,000 al año?

· ¿A dónde se fueron?

· ¿Fueron sacados a causa de sus pecados?

Probablemente, pero eso está en manos de Dios.

Gálatas 5:20: “Idolatría, brujería,…”—está viniendo demasiado de esto en la televisión—¿cierto?

“…odio,…” Recuerde, usted no puede tener el amor de Dios y odiar a su hermano. Es por eso que es importante en su relación con Dios que los perdone aunque ellos no hayan pedido perdón de modo que usted no está cargando ningún odio ni amargura.

“…pleitos, celos, indignaciones, contiendas, divisiones, sectas, envidias, asesinatos, borracheras, juergas, y cosas tales como estas; respecto a las cuales les estoy diciendo de antemano, así como también he dicho en el pasado, que aquellos que hacen tales cosas no heredarán el reino de Dios” (vs 20-21).

Eso nos dice donde comenzar. Ahora veamos como pasamos de la línea de comienzo a la línea final. Veamos en una Escritura y tendremos que llenar los blancos de en medio, la cual Jesús dio cuando Él estaba comenzando Su ministerio y estaba predicando el Sermón del Monte. Mateo 5:48 nos dice la meta.

· ¿Dónde comenzamos?

· ¿Cómo llegamos a la meta?

· ¿Por qué necesitamos el Espíritu Santo?

· ¿Qué necesitamos hacer para ejercitarlo nosotros mismos?

Dios espera de nosotros que trabajemos también. Él no va a venir por poder y ordenar y hacer robots. Él quiere: pensamiento, inteligencia, construir carácter espiritual dentro de nosotros.

· ¿Cuán grande es eso?

· ¿Cuán grande es esa meta?

Hermanos, paren y piensen por un minuto cuan enclenque hace esto a la ‘religión.’ Cuan increíblemente absolutamente y lamentablemente pobres son las promesas de ‘ir al cielo con su alma inmortal’ y ver la visión beatifica de Dios para siempre. ¡NO!

Mateo 5:48: “Por tanto, serán perfectos,…” ¿Cómo llegamos a ser perfectos? La Fiesta de Panes sin Levadura enfatiza lo que debemos hacer y como debeos hacerlo; y que es lo que tenemos que luchar y vencer para hacerlo. ¡Con Dios podemos hacerlo!

“…incluso como su Padre que está en el cielo es perfecto.” (v 48)

· ¿Qué tal esa meta?

· ¿Cómo va a ser alcanzada excepto a través de la obra de Dios en nosotros y por el poder de Espíritu Santo de Dios?

Es por eso que necesitamos tener pleno entendimiento, como he cubierto en la serie Restaurando el Cristianismo original para hoy, que necesitamos entender que estar bajo gracia significa que tiene acceso directo a Dios el Padre y Jesucristo continuamente—¡24/7!

Romanos 7 es muy interesante y también responde la pregunta en cuanto a por qué Dios no tan solo toma todo este mal de nosotros y lo remueve de una; como tomando una gran aspiradora y succionándolo, y ¡BANG! usted queda recto. ¡No! Allí tendría cabezas vacías y corazones vacíos. Él quiere todo eso removido ¡espiritualmente!

· es un proceso

· es algo en lo que necesitamos trabajar

· es algo contra lo que necesitamos luchar

· es algo contra lo que tenemos que estar en guardia

Necesitamos entender que Satanás el diablo está allí para tratar—a través del poder del espíritu del aire:

· hacernos hacer su voluntad

· poner un poquito de levadura en nuestras vidas

Entonces, debemos tener el Espíritu de Dios dentro de nosotros para reconocer el pecado. Debemos obedecer a Dios en el espíritu, ¡no tan solo la letra! Romanos 7 muestra esto a través de la Fiesta de Panes sin Levadura:

· tenemos un trabajo que hacer

· tenemos una batalla que pelear

· tenemos que ejecutar toda nuestra energía espiritual para hacerlo así

· debemos hacer esto diariamente

· esto debe ser en el interior, conversión del corazón y la mente

Romanos 7:7: “¿Qué diremos entonces? ¿Es la ley pecado? ¡DE NINGUNA MANERA! Pero yo no había conocido pecado, excepto a través de la ley. Además, yo no habría sido consciente de lujuria, excepto aquello dicho por la ley, “No codiciarás.””

· Una cosa es leerlo; ¡otra es entenderlo!

· Una cosa es creerlo; ¡otra es estar tocado por esto!

· Una cosa es saber lo que debería ser hecho; ¡otra es hacer realmente algo al respecto!

Pablo está explicando la pelea que tenemos espiritualmente. ¡No es una contradicción! Es un entendimiento verdadero de Marcos 7:21-23.

“…Además, yo no habría sido consciente de lujuria, excepto aquello dicho por la ley, “No codiciarás.”” (v 7). Debe entender que la lujuria está allí. Cuando llega la tentación y concibe la lujuria, entonces da nacimiento al pecado. Todo eso es parte de como lo vencemos.

Verso 8: “Pero el pecado, habiendo tomado una oportunidad por el mandamiento,… [el mandamiento esta siempre obrando] …produjo dentro de mí toda clase de lujuria porque separado de ley, el pecado estaba muerto.” Donde no hay ley no hay pecado. Sin embargo, la misma ley de nuestra mente, sin el Espíritu de Dios, es carnal, lujuriosa, llena de todas las características de Marcos 7.

Verso 8: “Pero el pecado, habiendo tomado una oportunidad por el mandamiento, produjo dentro de mí toda clase de lujuria porque separado de ley, el pecado estaba muerto. Porque estuve una vez vivo sin ley; pero después que llegó el mandamiento, el pecado revivió, y yo morí” (vs 8-9).

Algunas personas tienen una gran dificultad con eso. ¿Qué significa ese verso? Él no sabía en un tiempo como trabajaba en realidad la Ley, y nosotros tampoco. Pero después que vino el mandamiento—esto es después que comenzamos a entender acerca de los mandamientos de Dios y comenzamos a guardarlos—entonces empezamos a ver cuán absolutamente pecaminoso es el pecado. Entonces él dice, “…y yo morí.”

¿Cómo murió? ¡Murió en la tumba acuosa del bautismo! Así es como Pablo murió. Dejó de vivir para sí mismo. Eso es lo que es el bautismo. Dejamos de vivir para nosotros mismos y vivimos para Dios y por Dios. El Espíritu de Dios en nosotros, y el Espíritu Santo de Dios entonces llega a ser la morada del Padre y el Hijo.

Note lo que pasa cuando realmente comienza a entender cuan poderosos son los mandamientos, y como ellos definen el pecado. Recuerde, los mandamientos están siempre obrando todo el tiempo, justo como la ley de la gravedad.

Permítame sugerir esto: Si estas Escrituras en Romanos 7 le son difíciles de entender: estúdielas, ore acerca de eso, pídale ayuda a Dios para entender, porque las cosas del pecado de las que Pablo está hablando aquí son aquellas cosas internas en nuestro corazón y mente que tenemos que vencer y deshacernos. Justo como nos deshacemos de la levadura de nuestras casas, debemos deshacernos de la levadura de pecado de nuestra mente y corazón.

Verso 11: “Porque el pecado, habiendo tomado oportunidad por el mandamiento, me engañó, y por el me mató.” En otras palabras, su naturaleza engañosa en transgredir las leyes de Dios lo llevó a estar en una posición de muerte—la paga del pecado es ¡muerte! Veremos que todavía tenemos dentro de nosotros lo que Pablo llama ‘la ley de pecado y muerte’—y necesitamos trabajar y vencer eso.

Entonces, los seres humanos—como hacen en las ‘religiones cristianas’ hoy en día—se deshacen de la Ley, porque la Ley condena su consciencia. La Ley es dura, la Ley es tosca—deshágase de eso. ¡NO! Pablo dice tan solo lo opuesto.

Verso 12: “Por tanto, la ley es ciertamente santa, y el mandamiento santo y justo y bueno. Luego entonces, ¿esto que es bueno llegó a ser muerte para mí? ¡DE NINGUNA MANERA!…” (vs 12-13). La lección es como obedecer en el espíritu y como vencer.

Entonces, Pablo dice, “…¡DE NINGUNA MANERA! Sino el pecado, para que pudiera ser verdaderamente expuesto como pecado en mí…” (v 13). ¡Dentro del hombre! Del corazón de los hombres proceden los malos pensamientos.

“…por esto que es bueno, estaba obrando muerte; para que, por medio del mandamiento, el pecado pudiera llegar a ser excesivamente pecaminoso” (v 13). Usted entiende y comprende plenamente el significado entero de la depravación del pecado.

Aquí está la lección, v 14: “Porque sabemos que la ley es espiritual;… [siempre en acción] …pero yo soy carnal,…” Mientras estemos en la carne y estemos luchando la ley de pecado y muerte, aún tenemos carnalidad que vencer. La verdad es, el cumplimiento final de Mateo 5:48 es en la resurrección. Pero tenemos que crecer en gracia y conocimiento desde ahora y hasta entonces. Tenemos que ser fieles hasta la muerte.

“…habiendo sido vendido como un esclavo bajo pecado;… [¿A quién? ¡A Satanás el diablo!] …porque lo que estoy obrando,…” (vs 14-15). Lo que cualquier ser humano está haciendo, en realidad no comprenden lo que están haciendo. Piense en eso por un minuto.

Pablo dice, “…no lo sé.…” (v 15). ¿Cuántas veces ha intentado realmente hacer algo bueno y luego termina en un gran desorden? Luego se le sale de las manos y tiene una catástrofe de modo que el pecado puede llegar a ser excesivamente pecaminoso.

“…Porque lo que no deseo hacer,…” (v 15). A menos que sea obligado a dejar de cometer asesinato y se mantenga haciéndolo, nada va a pararlo. Pero lo que desea es hacer bien, y de alguna forma no sale de esa forma, aunque tenía la intención que fuera de esa forma.

“…eso hago; mas aun, lo que odio, eso es lo que hago” (v 15). Decide no hacerlo; no quiere hacerlo. ¿Cuántas veces ha dicho cuando hizo algo, ‘No sé porque hice eso’? ¡Pecado! ¡Naturaleza humana!

· ¡Tiene más que vencer!

· ¡Tiene levadura de la que deshacerse!

Verso 16: Pero si estoy haciendo lo que no deseo hacer, estoy de acuerdo con la ley que es buena.” La Ley no me hace hacerlo. La Ley me condena de lo que he hecho mientras es malo, por tanto, ¡la Ley es buena!

Verso 17: “Así entonces, no estoy más obrándolo yo mismo; más bien, es el pecado que está morando dentro de mí.” ¡Todos tenemos pecado interior! Es por eso que la levadura es un tipo de pecado; infla desde el interior. Muy interesante—¿cierto? ¡Sí, en verdad!

Verso 18: “Porque entiendo plenamente que no hay morada dentro de mí—… [este es el punto que necesitamos entender] …esto es, dentro de mi ser carnal—ningún bien.…” ¿Por qué? Porque cualquier bien que quiera hacer no elimina ‘la ley de pecado y muerte’ dentro de usted.

Este ‘bien’ es comparado a Dios, Quien es totalmente y perfectamente bueno. Nuestro ‘bien’ está siempre manchado con la naturaleza pecaminosa. ¡Piense en eso!

“…Porque el deseo de hacer el bien está presente dentro de mí;… [tenemos la intención de hacer bien, pero Dios no se mueve con intenciones] …pero como obrar eso lo cual es bueno, no encuentro” (v 18). Esto es dentro de mí mismo.

Con toda esta carga de la naturaleza humana y estando en contra de Dios, ¿cómo resuelvo esto?

(pase a la siguiente pista)

Veamos que la batalla espiritual que el apóstol Pablo tuvo es típica para todos nosotros, hermanos, en nuestro vencer. Entendamos que Dios comprende esto; Dios lo sabe, entonces hay esperanza. Sin embargo, tenemos que ejercitar el Espíritu de Dios en nuestros pensamientos para deshacernos de esas cosas y orar sobre deshacernos de eso en el interior: un cambio de corazón, una conversión de mente.

Veamos cuan importante es esto y por lo que Pablo pasó, todos también pasamos, y como Dios mira esto.

Romanos 7:21: “Consecuentemente, encuentro ésta ley en mis miembros,…” ¡Está allí! Él la llama en Romanos 8 ‘la ley de pecado y muerte.’

“…que cuando deseo hacer el bien, el mal está presente conmigo. Porque me deleito en la ley de Dios de acuerdo al hombre interior” (vs 21-22). Usted ama la Ley de Dios. Justo como dice en el Salmo 119: ‘Amo Tu Ley.’ ¡Nosotros también! Amamos el camino de Dios, pero entonces, tenemos que vencer la carnalidad que aún tenemos. El final deshacerse de esto será en la resurrección.

Verso 23: “Pero veo otra ley dentro de mis propios miembros, en guerra contra la ley de mi mente, y llevándome cautivo a la ley de pecado que está dentro de mis propios miembros.” Esto es un gran entendimiento, hermanos. Es por eso que tenemos que llegar a amar a Dios tanto que podamos ver el mal que está allí que Dios quiere que nos deshagamos.

· tenemos que poner el esfuerzo

· tenemos que usar el Espíritu de Dios

· tenemos que usar la Palabra de Dios

· tenemos que orar a Dios

Todas estas cosas combinadas. Entonces, Pablo dice:

Verso 24: “¡Oh que hombre miserable soy! ¿Quién me salvará del cuerpo de esta muerte? Doy gracias a Dios por Su salvación…” (vs 24-25). Piense de lo que está siendo salvado. Recuerde, la revelación de estos pecados internos está siendo revelada por el Espíritu Santo:

· de modo que puede arrepentirse de ellos

· de modo que puede deshacerse de ellos

· de modo que puede sacar esa levadura de su mente

Así como hay levadura en el aire, hay pecado en el aire, y estas cosas tratan y vuelven dentro de nosotros. Pero a través del Espíritu de Dios crecemos, cambiamos y vencemos.

Verso 25: “Doy gracias a Dios por Su salvación a través de nuestro Señor Jesucristo. A causa de eso, por un lado, yo mismo sirvo a la ley de Dios con mi mente; pero por otro, con la carne, sirvo a la ley de pecado.” Esto se refiere a las cosas carnales dentro de nosotros que están causando esto—¡no a Dios!

Romanos 8 llega a ser importante, y veremos cómo estas cosas son vencidas. Romanos 8:1: “Consecuentemente,…”—en luz de todo lo que cubrimos en Romanos 7, y hay demasiado allí. Necesitamos entender que así es exactamente como es con nosotros.

“…entonces no hay condenación…” (v 1). Dado que estamos luchando para vencer el pecado, Dios no nos condena. La condenación viene cuando estamos de acuerdo con eso y pecamos. Lo consentimos y pensamos que es bueno. Esa es la condenación. Pero tenerlo expuesto en nuestra mente para arrepentirnos, ejerciendo el esfuerzo de vencer usando el poder del Espíritu Santo, “…entonces no hay condenación…”

“…a aquellos que están en Cristo Jesús, quienes no están caminando de acuerdo a la carne,… [aunque el jalón de la carne está allí. No estamos caminando de esa forma] …sino de acuerdo al Espíritu” (v 1).

Veamos lo que el Espíritu de Dios hace por nosotros, v 2: “Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley de pecado y muerte.” Eso significa que tenemos los medios dados a nosotros, el Espíritu de Dios, el cual si lo ejercitamos, nos librará de ‘la ley de pecado y muerte’—la ley de pecado mientras vivimos, y la ley de muerte por la resurrección. Esto llega a ser importante de entender. Él no la ha removido. Pero debemos deshacernos de ella. Veamos cómo va a ser hecho eso, porque es importante.

Verso 3: “Porque lo que era imposible hacer para la ley,…” La Ley no puede hacer que usted haga ‘bien.’ La Ley le dice lo que es correcto y equivocado, bien y mal; pero usted de be escoger hacer ‘bien.’ ¡Es el Espíritu de Dios lo que nos convierte!

“…en que era débil a través de la carne, Dios, habiendo enviado a Su propio Hijo en la semejanza de carne pecaminosa, y por el pecado, condenó el pecado en la carne” (v 3). Jesús tomó sobre Él ‘la ley de pecado y muerte,’ y nunca pecó de modo que podemos recibir del Espíritu de Dios para vencer. Él condenó la ‘ley de pecado y muerte’ en Su carne. Él “…habiendo enviado a Su propio Hijo en la semejanza de carne pecaminosa,…” y condenó el pecado en la carne. Esto es todo lo esencial de la crucifixión. Dios era el Único Quien podía hacerlo. Ahora Él nos da la fortaleza de modo que podemos hacerlo.

Verso 4: “Para que la justicia de la ley pudiera ser cumplida en nosotros,…” ¿Cómo? Al tener las leyes y mandamientos de Dios escritos en nuestros corazones y mentes. ¡Así es como! Y por el Espíritu de Dios para guiarnos y dirigirnos así tenemos el poder espiritual para hacerlo.

“…quienes no estamos caminando de acuerdo a la carne, sino de acuerdo al Espíritu” (v 4). Veamos como es alcanzado esto.

II Corintios 4—es lo que necesita ser con nosotros, porque debemos vencer diariamente, semanalmente, mensualmente, anualmente—no obstante lo que vivamos—esto nos da la capacidad de crecer en gracia y conocimiento. Esto nos da la capacidad de ejercitar el Espíritu de Dios y trabajar hacia la perfección de Dios el Padre. ¡Esa es toda la meta!

¿No es interesante que Jesús recalcara eso en el Sermón del Monte? Algo tremendo. Leamos lo que dijo Pablo, y él lo explica de esta forma de modo que podemos entender lo que está teniendo lugar.

II Corintios 4:16: “Por esta razón, no nos desanimamos; sino que si nuestro hombre exterior está siendo traído a decadencia,… [nos estamos haciendo más y más viejos; cada año gente muere en la fe y espera la resurrección] …aun así el hombre interior está siendo renovado día a día.”—esto es el espíritu interior: Lo que Dios está haciendo en nosotros espiritualmente.

También veamos lo que Pablo está diciéndonos, mostrando que es un esfuerzo diario, mostrando que es algo que necesitamos trabajar en oración y estudio, en ejercer los frutos del Espíritu Santo de Dios:

I Corintios 15:31: “Muero diariamente por nuestra jactancia la cual tengo en Cristo Jesús nuestro Señor.” Dios lo hace posible.

· ¡Él es el Único Quien nos da la energía y poder!

· ¡Él es el Único Quien nos guía a la victoria!

¡Piense en eso! Veamos lo que Pablo concluye, Gálatas 5:24: “Pero aquellos que son de Cristo han crucificado la carne…”

· todas las obras de la carne

· toda la naturaleza carnal

estamos

· crucificándola diariamente

· peleando contra ella

· deshaciéndonos de ella

Se nos ordena ¡ponerla a morir! Pablo dijo, “Muero diariamente…”

“…con sus pasiones y lujurias. Si vivimos por el Espíritu, también deberíamos estar caminando por el Espíritu” (vs 24-25). ¿Cómo caminamos por el Espíritu? Aún estamos en la carne, entonces ¿cómo caminamos por el Espíritu?

Colosenses 3 nos dice lo que debemos hacer, como debemos pedirle a Dios que nos perdone, pedirle a Dios que nos ayude a identificar el pecado dentro de nosotros—así no tenemos ídolos internos y Dios tratará con nosotros a causa de eso—y lo que tenemos que hacer para vencer. Aquí está lo que debemos hacer:

Colosenses 3:1: “Por tanto, si ustedes han sido levantados junto con Cristo,… [a través de la operación del bautismo] …busquen las cosas que están arriba,…” Pongan primero todas las cosas espirituales:

· el amor de Dios

· la Verdad de Dios

· la fe de Dios

· la Palabra de Dios

· todas nuestras acciones

“…donde Cristo está sentado a la mano derecha de Dios” (v 1).

· para interceder por usted

· para ayudarlo

· para dirigirlo

· para guiarlo

Verso 2: “Coloquen su afección sobre las cosas que están arriba, y no sobre las cosas que están sobre la tierra.” Porque la gloria que vamos a recibir es más grande que cualquier cosa que podríamos imaginar en la tierra.

Verso 3: “Porque han muerto,… [en la tumba acuosa del bautismo] …y sus vidas han sido ocultas junto con Cristo en Dios.” Esto es algo tremendo—¿cierto? ¡Sí, en verdad!

Verso 4: “Cuando Cristo, Quien es nuestra vida, sea manifestado, entonces ustedes también serán manifestados con Él en gloria.” Justo exactamente como escribieron los apóstoles.

Verso 5: “Por tanto, condenen a muerte… [no deje que estos pecados reinen en usted] …sus miembros los cuales están sobre la tierra—inmoralidad sexual, impureza, afecto desordenado, deseos malignos, y codicia, la cual es idolatría.” Aquellas cosas de las que Pablo nos dice que hacer, ‘¡ponga a morir esas cosas!’ Pablo dice que nosotros ‘crucificamos estas cosas diariamente.’

Verso 6: “Porque por estas cosas, la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia, entre quienes ustedes también caminaron una vez, cuando estaban viviendo en estas cosas. Pero ahora, deberían también quitarse todas estas cosas:… [aquí hay algunas cosas que necesitamos desechar] …ira, indignación, malicia,…” (vs 6-8).

Yo he hecho esto: ‘Oh Señor, ayúdame a vencer mi temperamento.’ Me levanto de mis rodillas y luego algo ocurre donde pierdo mi temperamento. Pienso: ¿Dios no respondió esa oración? ¡NO! Dios respondió la oración. Él me dio una oportunidad para no perder mi temperamento, o no enojarme, ¿pero qué pasó? ¡No pasé la prueba! Sí, Dios respondió la oración, entonces necesitamos arrepentirnos nuevamente, y pedirle a Dios que nos ayude a identificar cuando estas cosas vienen. Cuando algo ocurra en que usted normalmente se enoje, o pierda su temperamento, tome un respiro profundo, pida la ayuda de Dios, y ¡Él lo ayudará!

Note las cosas que persisten incluso en nuestras vidas cristianas concerniente a vencer el pecado interior: “…ira, indignación, malicia, blasfemia, y lenguaje sucio de su boca. No mienta el uno al otro,…” (vs 8-9). ¿Cristianos que mienten uno al otro? ¡Ah! Ese corazón engañoso es realmente engañoso—¿cierto? ¡Sí, en verdad!

“…viendo que ustedes deben deshacerse del viejo hombre junto con sus obras” (v 9). Todo esto es sacar la levadura. Todas estas cosas que hemos leído es levadura, levadura espiritual, de la que necesitamos deshacernos.

Note lo que hacemos; una cosa es sacar la levadura de su casa, una cosa es sacarla de su vida al confesar sus pecados, pero necesita ¡cambiar su comportamiento!

Verso 10: “Y deben vestirse el nuevo hombre,…” El nuevo usted, el usted que Dios está creando dentro de usted, con:

· el carácter espiritual

· el amor

· la Verdad

· la guianza

Todo eso que viene del Espíritu de Dios.

“…quien está siendo renovado… [creado en verdadera Santidad] …en conocimiento, de acuerdo a la imagen de Aquel Quien lo creó; donde no hay ni griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, esclavo ni libre; sino Cristo es todas las cosas, y está en todos” (vs 10-11). ¡Vístase el nuevo hombre!

Veamos que debemos ejercitar, v 12: “Vístanse entonces,… [debemos deshacernos de estas cosas porque nos vestimos del nuevo hombre] …como los elegidos de Dios, santos y amados, de profundo afecto interior, amabilidad, humildad, mansedumbre y paciencia; soportándose uno al otro, y perdonándose uno al otro si cualquiera tiene una queja contra otro; incluso como Cristo los perdonó, así también ustedes deberían perdonar” (vs 12-13).

Esto es lo que necesitamos hacer hermanos; porque nuestra naturaleza humana puede ofender a alguien, y algunas veces no caemos en cuenta que lo hicimos. Si tenemos, necesitamos arrepentirnos. Estas son cosas que necesitamos pedirle a Dios que nos ayude a traer a nuestras vidas diariamente: “…incluso como Cristo los perdonó, así también ustedes deberían perdonar.”

Verso 14: “Y sobre todas estas cosas… [aquí está el punto al que llegamos]: …vístanse de amor, el cual es el vínculo de la perfección”—porque estamos siendo perfeccionados en Cristo. Es por eso que todo comienza con el amor de Dios y viene claro plenamente en todo lo que hacemos como cristianos, y vuelve de regreso a

· el amor de Dios

· el amor de los hermanos

· el amor de nuestro prójimo

· el amor de nuestros enemigos

Verso 15: “Y dejen que la paz de Dios gobierne en sus corazones,…” ¡Ese es el gobierno de Dios! Con esto, todos los ministros entonces llegan a estar al costado:

· para enseñar

· para ayudar

· para animar

· para inspirar

· para mostrar el plan de Dios

Así como entrenadores en un equipo de atletas, ellos están a un lado, pero todos los jugadores están allí y él los está entrenando sobre cómo hacer eso, como hacer lo otro, como mejorar, como cambiar, que táctica tomar y demás.

¡Ese es el papel de los ministros y ancianos! No ser gobernadores sobre los hermanos. Si Cristo no puede reinar en nosotros, como cree la gente—con la extensión de imaginación que pueden tener—que el gobierno del hombre va a ser mejor que el gobierno de Cristo. ¡Eso no funcionará!

Necesitamos tener las cosas en orden. Necesitamos hacer las cosas en la forma correcta. Pero no necesitamos una jerarquía gobernando sobre nosotros.

Verso 15: “Y dejen que la paz de Dios gobierne en sus corazones, para lo cual fueron llamados en un cuerpo, y sean agradecidos. Dejen que la palabra de Cristo viva en ustedes ricamente en toda sabiduría, enseñándose y amonestándose uno al otro en salmos e himnos y cantos espirituales, cantando con gracia en sus corazones al Señor. Y en todo—lo que sea que hagan en palabra o en hecho—háganlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios y Padre por Él” (vs 15-17). Esto es algo tremendo que necesitamos esperar. Este es el significado de la Fiesta de Panes sin Levadura, de modo que

· podemos llegar a ser convertidos

· podemos ser cambiados

· podemos ser renovados en el espíritu de nuestra mente

· podemos crecer y tener la mente de Cristo

Gálatas 5:22: “Pero el fruto del Espíritu es amor,…” Esto es lo que debemos producir; esto es lo más importante porque el amor vence muchos pecados. Por el amor de Dios tenemos nuestros pecados perdonados. Por el amor de Cristo Él nos limpia de todo pecado y toda injusticia. Esa limpieza es el lavado del agua por la Palabra, de modo que podemos empezar a:

· pensar con la Palabra de Dios

· pensar con los principios de Dios

· desarrollar el carácter de Dios

· desarrollar el carácter de Jesucristo

Estamos siendo perfeccionados. No va a ser todo hecho de un día para otro. No, no lo será. Esto es algo en lo que debemos trabajar. Desarrollar el amor de Dios.

“…gozo,…”—incluso en tiempos de dificultades. Sabemos que después de la dificultad que ha sido vencida, entonces cosas más grandes van a ser dadas. ¡Mantenga eso en mente!

“…paz,…” En el Sábado durante la Fiesta de Panes sin Levadura, vamos a hablar acerca de la paz de Dios—el pacto de paz que tenemos con Dios, el cual lleva a la perfección.

“…paciencia,…” No solo tener paciencia, pero esto significa que sufre bastante. Si tiene algunas cosas con las que ha estado sufriendo porque es algo físico o mental, dificultades o batallas, pero aún se rinde a Dios y no sucumbe a eso.

“…amabilidad,… [más que dureza] …bondad, fe, mansedumbre, autocontrol;…” (vs 22-23). Todo esto llega al autocontrol y al poder del Espíritu Santo.

Verso 16: “Entonces esto digo, caminen por el Espíritu, y no cumplirán la lujuria de la carne.” No, usted no hará eso. Usted hará como encontramos en Colosenses 3: lo crucificará, pondrá a morir.

Verso 17: “Porque la carne codicia contra el Espíritu,… [esta batalla de ley de pecado y muerte dentro de nosotros es continua] …y el Espíritu contra la carne; y estas cosas son opuestas una a la otra, para que ustedes no puedan hacer esas cosas que desean hacer. Pero si son guiados por el Espíritu, no están bajo ley” (vs 17-18).

Usted no está bajo la ley de condenación como el resto del mundo. Estamos bajo perdón y misericordia y acceso a Dios de modo que podemos tener nuestros pecados perdonados y crecer en gracia y conocimiento.

Verso 23: “…contra tales cosas no hay ley. Pero aquellos que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y lujurias. Si vivimos por el Espíritu, también deberíamos estar caminando por el Espíritu” (vs 23-25). Eso es lo que significa guardar la Fiesta de Panes sin Levadura y la lección para nosotros de sacar la levadura: de nuestras casas, y sacar la levadura de pecado de ¡nuestras vidas! Si estamos haciendo esto ¡no hay condenación! Sino Dios está:

· con usted

· amándolo

· dirigiéndolo

· guiándolo

—¡en todo!

Este es el significado de la Fiesta de Panes sin Levadura para aquellos quienes son ¡verdaderos cristianos!

Escrituras referenciadas:

1) Mateo 13:52

2) Levítico 23:6-8

3) II Corintios 9:6-8

4) I Corintios 5:6-8

5) Marcos 7:20-23

6) Gálatas 5:19-20

7) Ezequiel 14:1-6

8) Gálatas 5:20-21

9) Mateo 5:48

10) Romanos 7:7-9, 11-18, 21-25

11) Romanos 8:1-4

12) II Corintios 4:16

13) I Corintios 15:31

14) Gálatas 5:24-25

15) Colosenses 3:1-17

16) Gálatas 5:22-23, 16-18, 23-25

Escrituras referenciadas, no citadas:

· Apocalipsis 2; 3

· Salmo 119

También referenciado: Serie de sermones:

Restaurando el Cristianismo original para hoy

Derechos de Autor 2014—Todos los derechos reservados. Excepto por breves extractos para propósito de revisión, ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida o usada en ninguna forma o por ningún medio sin el permiso escrito del dueño de los derechos de autor. Esto incluye fotocopia o grabación electrónica y mecánica, así como el uso de sistemas de almacenamiento y recuperación de información.